Si eres pareja de una persona que sufre adicción, a estás alturas la desconfianza está instalada en tí a niveles desorbitados, incluso casi podría asegurar que dentro de tu desesperación, te has atrevido a mirar en su teléfono y ordenador y puede que hayas visto que navega por web de pornografía o que haya mantenido relaciones sexuales con otras persona. Si estoy es así entiendo que debes estar destrozado y no es para menos. Lo que a continuación te muestro no es una justificación no mucho menos, pero sí una explicacion cognitiva de porque pasa esto.
El consumo de cocaína está estrechamente ligado a un aumento de las conductas sexuales de riesgo y compulsivas, lo que incluye una relación con el consumo obsesivo de pornografía y la búsqueda de servicios de prostitución.
Esta relación se basa en varios efectos de la cocaína:
Aumento temporal del deseo y la desinhibición: La cocaína es un potente estimulante que eleva la dopamina en el cerebro, provocando una euforia inicial, un aumento de la libido y una disminución significativa de las inhibiciones. Esto lleva a las personas a asumir riesgos sexuales que no tomarían estando sobrias.
Comportamiento sexual compulsivo: La combinación de mayor deseo y menor control impulsa comportamientos sexuales compulsivos, como el consumo obsesivo de pornografía y la búsqueda de encuentros sexuales de alto riesgo, como la prostitución.
Disfunción sexual y frustración: Irónicamente, el uso crónico de cocaína a menudo provoca el efecto contrario a medio y largo plazo, causando disfunción eréctil o pérdida de libido. Esta frustración empuja al individuo a buscar comportamientos sexuales cada vez más intensos o inusuales (incluida la prostitución) para compensar, reforzando el ciclo de consumo de drogas.
Recaída recíproca (Doble Adicción): Existe una alta comorbilidad entre el consumo de cocaína y las conductas sexuales compulsivas. La actividad sexual, incluida la pornografía y los encuentros con prostitutas, se asocia fuertemente con el consumo de drogas. Una puede desencadenar la otra, dificultando la recuperación.
Impacto Destructivo en la Relación de Pareja
Las consecuencias de esta combinación de adicciones son devastadoras para la vida en pareja, minando la confianza y la estabilidad emocional:
Pérdida de Confianza y Engaño: La necesidad de ocultar tanto el consumo de cocaína como el gasto de dinero y tiempo en prostitución o pornografía genera un patrón de mentiras y secretos. Cuando el engaño se descubre, la confianza queda destruida, siendo uno de los daños más difíciles de reparar en la relación.
Riesgo de ITS e Infidelidad de Alto Riesgo: La participación en encuentros con prostitutas bajo los efectos de la cocaína implica a menudo prácticas sexuales desprotegidas, exponiendo a la pareja al riesgo de contraer Infecciones de Transmisión Sexual (ITS). Esto añade una capa de miedo y amenaza física a la traición emocional.
Distanciamiento Emocional y Desinterés: La energía y el foco del adicto se dirigen hacia la droga y la conducta sexual compulsiva, provocando un distanciamiento de la intimidad emocional y física con la pareja. La relación genuina es sustituida por la búsqueda de gratificación inmediata, dejando a la pareja sintiéndose sola, no deseada e irrelevante.
Estrés, Ansiedad y Culpa: La pareja del consumidor a menudo vive en un estado constante de ansiedad y estrés, lidiando con el comportamiento errático del adicto, la inestabilidad económica y el dolor de la infidelidad. Por su parte, el adicto experimenta profundos sentimientos de culpa y vergüenza después del subidón, lo que puede llevar a un nuevo consumo como mecanismo de escape.
Ruptura de la Intimidad Sexual: El sexo con la pareja puede volverse insatisfactorio o imposible, ya sea por la disfunción sexual inducida por la droga o porque la cocaína y la pornografía/prostitución han reescrito el circuito de recompensa del cerebro, haciendo que la intimidad normal parezca aburrida.
En resumen, la combinación de cocaína y impulsividad sexual no solo afecta al individuo, sino que desintegra los cimientos de la relación de pareja, dejando un rastro de traición, enfermedad potencial y profundo dolor emocional.
Añadir comentario
Comentarios